Mis suicidas favoritos

miércoles, 11 de marzo de 2009

Sobre el suicidio sabemos que es una conducta autodestructiva en la que las personas buscan solucionar los problemas que les aquejan de manera abrupta (quitándose la vida). El psicoanálisis lo define como el un homicidio contra uno mismo a causa del abandono vivido por los demás. La agresividad que siento hacia el entorno la dirijo hacia mi y por ello me suicido”.

Se ha querido relacionar la imaginación creativa con el suicidio, quizás por la sensibilidad que se requiere para pintar, fotografiar o escribir, citando sólo tres manifestaciones artísticas. Esta sensibilidad que logra en otros sentidos cuando logramos captarla en un grado de tristeza puede llevarnos a decisiones exageradas. Esta idea tuvo como principal precursor a
Cesare Lombroso, que relacionó el genio artístico con la esquizofrenia debido al elevado repertorio de pacientes que sufrían de este mal y que lograban crear por medio de la expresión creativa su atormentado y complejo mundo interior.

En la actualidad se tiene en claro una cosa y es que el suicidio no es potestad de mentes creativas o artísticas, el suicidio es la repercusión de un mal en la psique de una persona, de cualquier persona. En tal sentido, los escritores son personas que además del talento que tienen para escribir o decir algo, sufren como cualquier persona y no están exentos a problemas mentales que puedan acabar en suicidio...
Artículo completo (Tinta Digital)

Por: Javier Sicchar



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Gran artículo. Me ha recordado a James Leer, el personaje de Wonder boys obsesionado con los suicidios de las estrellas de Hollywood.

Mi lista de escritores suicidas favoritos: Cesare Pavese, Paul Celan, Sandor Marai y Thomas Chatterton, aunque debo confesar que Sylvia Plath (en pequeñas dosis) me parece muy interesante.

Un saludo.

Javier dijo...

Yo creo en todo caso que siempre tenemos un tipo de fascinación hacia la muerte. Fuera cual fuera la manera como nos acerquemos a esta, estña allí.

kuinzito dijo...

Yo creo mi estimado que te falta acercarte mas a la muerte de una manera menos "académica".